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Cristina Müller

Resulta muy complicado ésto de escribir sobre quién soy, así que prefiero comenzar con algo sencillo y apenas llego a presentarme: mi nombre es Cristina y nací en Venezuela como hija de inmigrantes en 1974, lo cuál probablemente les dice algo de quién escribe. Imagino un tanto filosófico el porqué me resulta difícil describir (me): ¿Quién he sido?, ¿quién seré? o probablemente algo todavía más complejo: ¿quién quiero ser?. Enfocada en un interés personal por la Literatura en general y por la ilustración de Literatura Infantil en particular, recibo mi grado como ilustradora en Caracas en 1996 y luego incorporo un Máster en Literatura Infantil y Promoción de la Lectura en la Universidad de Castilla La Mancha, en España. En lo profesional, me ha resultado estimulante ver cómo palabras e imágenes pueden contradecirse, complementarse, independizarse o hacerse estrictamente interdependientes y tienen infinitas maneras de relacionarse entre sí mediante una variedad de tonos, formas, temas, discursos, lenguajes, estructuras y estilos literarios. Al menos, tantas como lectores. Después de todo no deja de sorprenderme la capacidad que tiene la imagen de comunicar, desde lo más simple hasta lo más universal simultáneamente, dedicando su mensaje a lectores tan distintos y distantes que pueden no compartir idioma o incluso alfabeto. Cualidad magnífica ésta de la imagen, que burla fronteras lingüísticas y geográficas. Durante varios años, ejercí como docente en la Escuela de Comunicación Visual, Prodiseño y he formado parte del Comité de Evaluación y Selección de Libros del Banco del Libro. Como ilustradora, he experimentado con el potencial creativo y comunicativo que ofrecen ambos códigos en su diálogo y por eso tengo la sensación de que el oficio es un espacio constante de investigación en torno a la retórica de la imagen, que va un poco entre la construcción de una narrativa visual propia y una invitación a la lectura. En lo personal, hace año y medio nació Manuela, mi hija, y con ella cada día tengo mucho por descubrir. Divertida, sólo podría terminar expresando toda la ilusión que tengo por lo que viene.